Miembro - Ecovon

Ecovon cree que hay una forma mejor de fabricar materiales de construcción. Por eso centramos nuestra energía en repensar y rediseñar por completo la forma de fabricar la nueva generación de materiales de construcción. Ecovon está desarrollando madera de origen sostenible y nueva ingeniería a partir de cáscara de coco y bagazo de caña de azúcar, suministrando al mercado mundial una alternativa de madera biológica sin formaldehído que es mejor para las personas y el planeta. Ecovon lanzará al mercado el primer producto de madera renovable de origen biológico sin aditivos, que es ignífugo y antifúngico por naturaleza, sin aglutinantes (colas) añadidos. Sus propiedades físicas son mejores que las de las maderas de ingeniería comparables que existen actualmente en el mercado, todas las cuales utilizan aditivos y productos químicos pesados para conseguir propiedades ignífugas adicionales, al tiempo que reducen nuestra huella de CO2, la deforestación y enriquecen la vida de los habitantes de los países en desarrollo productores de coco y caña de azúcar, como Ghana. Se ha demostrado que el material del tablero presenta unas propiedades excelentes, comparables o incluso superiores a las de los tableros comerciales a base de madera. Nuestro producto es más resistente y duradero, tiene un precio considerablemente inferior y es más ecológico. La cáscara de coco tiene el mayor contenido de lignina de todas las plantas conocidas, lo que ayuda a que la materia prima se aglutine en un tablero duro sin necesidad de añadir ningún pegamento o aglutinante perjudicial. Gracias a su resistencia, el tablero puede utilizarse como elemento estructural en edificios. También tiene propiedades antifúngicas naturales y arde tres veces más despacio que la madera. El método es sostenible y respetuoso con el medio ambiente. El material residual del coco se utiliza en su totalidad. Es una buena alternativa a la madera y contribuye a evitar la deforestación. Durante la producción, no es necesario añadir cola ni agentes químicos. Además, la producción es neutra en emisiones de CO2. No es caro. La cola que hay que añadir cuando se fabrican tableros a base de fibra de madera supone un tercio de los costes totales de producción. La cola no es necesaria para transformar la cáscara de coco en material para tableros. Puede constituir una fuente adicional de ingresos para los agricultores de los países en desarrollo.