Noticias - 22 de abril de 2020
Escrito por Michèle Piccard 5 min lectura
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"Cuando era niño, la humanidad soñaba con enviar un hombre a la Luna. Esta misión épica me fascinaba y las hazañas de los astronautas me inspiraban hasta tal punto que yo mismo me convertí en un explorador.
Los héroes de mi infancia eran los que se lanzaban a descubrir regiones misteriosas, a conquistar las profundidades del océano y el espacio. En la actualidad, los retos han cambiado junto con el significado de la exploración. Los héroes de hoy son los que se comprometen a mejorar la calidad de vida en nuestro planeta. Son ellos los que deberían inspirarte, a través de sus formas de pensar y hacer, a convertirte en un explorador de los tiempos modernos.
Para ello, debes empezar por interesarte por el mundo e intentar comprenderlo. Debes hacer preguntas sobre todos los temas, muchas preguntas, y no conformarte nunca con respuestas fáciles como "eres demasiado joven para entenderlo" o "así son las cosas". Así actuaba yo de niño, a veces volviendo loco a mi entorno al quedarse sin respuestas. Esto afinó mi curiosidad y me hizo querer descubrir lo que otros no entendían. Poco a poco desarrollé en mi mente una brújula cuya aguja no apuntaba al Norte, sino a lo desconocido, a todo lo que estaba por descubrir.
El primer valor que aprendí fue, pues, la curiosidad, sin la cual no se intenta nada nuevo. Pero esto se combina con la perseverancia, sin la cual no se puede lograr lo que se emprende. Y por último, el respeto, que da pleno sentido a nuestros éxitos.
Tenlo en cuenta cuando te plantees tus posibilidades de futuro, cuando tengas que decidir sobre tus estudios y tu profesión. Tienes derecho a creer en tus sueños y a poner los medios para alcanzarlos".
La epopeya del Solar Impulse se inscribe en una larga tradición de desafíos científicos y humanos que han marcado la historia de la aviación y han cambiado el mundo.
Todo comenzó tras el exitoso vuelo de Bertrand alrededor del mundo en globo. De hecho, además de su espíritu aventurero, Bertrand siempre se preocupó por la protección del medio ambiente. Para transmitir su mensaje al mundo entero, sueña con construir el primer avión capaz de volar de día y de noche sin combustible. Una idea descabellada, una hazaña peligrosa pero un magnífico símbolo para nuestro planeta.
¡Y qué aventura fue construir este avión! Como en cualquier proyecto revolucionario, hay que inventar estrategias desde cero. Esto significa superar los límites de lo que se conoce, atreverse a cuestionarse, tomar decisiones difíciles, atenerse a las limitaciones y hacer concesiones... Finalmente, tras muchos años dedicados a hacer cálculos, construir el avión, realizar vuelos de prueba y entrenar, la aventura comenzó en 2015.
Por supuesto, hubo muchas anécdotas increíbles durante el viaje de 40.000 km, como cuando las autoridades indias se olvidaron de sellar el pasaporte de Bertrand a su llegada, convirtiéndolo en un piloto clandestino en suelo indio, o cuando el itinerario del avión fue desviado por las condiciones meteorológicas a... Dayton, la ciudad natal de los hermanos Wright, que fueron los primeros en volar en avión a principios del siglo XX. Imagina que, un siglo después, dos pioneros pudieran dar la vuelta al mundo con energía limpia.
En cada parada, en Abu Dhabi, en la India, en Japón, en Estados Unidos o en España, muchos niños se acercaron a admirar con sus propios ojos este avión único... Frente a este revolucionario avión con 17.248 células solares, midieron la hazaña, el horizonte de cambio que anunciaba e imaginaron un futuro diferente hecho de soluciones sostenibles.
Una historia, un éxito y un mensaje en el cielo que llevan a los niños a creer en sus sueños, a abrirse al abanico de posibilidades y a convertirse en exploradores del mundo del mañana.
SI for KIDS A4 Abril 2020 by Tristan Lebleu on Scribd
¿Cómo podemos imaginar el mundo del mañana y qué podemos hacer concretamente por nuestro planeta?
Bertrand quiere demostrar que las soluciones existen en muchos lugares del mundo, aunque se ocultan con demasiada frecuencia en empresas jóvenes o laboratorios de investigación, y desea fomentar su aplicación. Por ello, ha asumido el nuevo reto de reunir un millar de estas soluciones capaces de transformar nuestras ciudades, nuestra agricultura, nuestra industria, nuestros transportes y nuestra forma de producir energía, con el fin de mejorar nuestro modo de vida. Bertrand y The Solar Impulse Foundation centran su acción en cinco áreas para movilizar soluciones: energía, agua, consumo y producción, industria, ciudades y movilidad.
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Si quieres profundizar en la aventura de Solar Impulse, consulta nuestra lección Ted Ed
Algunos de los textos anteriores están extraídos del libro "Flying on Sunshine" de Michèle Piccard (Ed. Larousse Jeunesse)
Las ilustraciones son obra de Martin Saive, deCartoonbase.
Escrito por Michèle Piccard en 22 de abril de 2020